El reconocido promotor vallenato se detuvo para ayudar a unos ocupantes de un vehículo siniestrado en el sector de Camarones, pero otro carro lo arrolló segundos después. La solidaridad le costó la vida.
El mundo del vallenato está de luto, Jair Martínez Escorcia, mánager del cantante guajiro Eduard Gamarra, murió en un trágico accidente la noche del sábado en la vía Riohacha–Santa Marta, cuando fue arrollado por un vehículo mientras auxiliaba a unas personas que minutos antes habían sufrido un siniestro vial en el sector de Camarones, en La Guajira.
Según el reporte de testigos, la agrupación viajaba hacia Santa Marta para cumplir con una presentación privada cuando se toparon con un automóvil que había chocado contra un caballo que cruzó la carretera. El carro terminó fuera de la vía y al notar la emergencia, Martínez pidió detener el bus para prestar ayuda.
Sin pensarlo dos veces, descendió junto a varios músicos para verificar el estado de los heridos. Sin embargo, la oscuridad del tramo y la falta de señalización hicieron imposible prever lo que ocurriría segundos después: un vehículo que circulaba a gran velocidad los embistió violentamente, dejando a Jair sin vida y a varios integrantes de la agrupación heridos.
El impacto fue tan fuerte que algunos testigos apenas alcanzaron a reaccionar. “Todo pasó en un parpadeo, no hubo tiempo de nada”, contó un conductor que presenció el accidente. Los heridos fueron trasladados a centros asistenciales de Riohacha, mientras las autoridades acordonaron el área para realizar las investigaciones.
La Policía de Tránsito y Transporte de La Guajira evalúa las causas del siniestro y no descarta que la presencia del animal, la escasa iluminación y la velocidad fueran factores determinantes. También se revisa si el conductor implicado intentó frenar o perdió el control del vehículo al notar la emergencia.
La muerte de Jair Martínez generó conmoción en el gremio vallenato, donde era reconocido como un gestor incansable y un hombre entregado a los sueños de los artistas que representaba. Su trabajo junto a Eduard Gamarra y otros talentos guajiros le había ganado el respeto y cariño del medio.