La Policía Metropolitana confirmó que la menor de 13 años reportada como víctima de secuestro en el barrio Obrero nunca estuvo en peligro: todo fue un invento suyo que alarmó a la comunidad
La tarde del miércoles 20 de agosto, el barrio Obrero de Santa Marta se vio conmocionado por la supuesta desaparición de una niña de 13 años. Testigos afirmaron que una camioneta gris la interceptó en la calle y que varios hombres la obligaron a subir al vehículo.
La versión se expandió rápidamente en redes sociales y chats comunitarios, donde comenzaron a circular mensajes y videos que confirmaban el presunto rapto. La angustia se apoderó de familiares y vecinos, quienes alertaron a las autoridades.
La reacción de la Policía
Ante la gravedad del caso, uniformados de la Metropolitana de Santa Marta activaron un plan candado en distintos sectores de la ciudad. Miembros de la SIJÍN y del Gaula se unieron a la búsqueda de la menor, cerrando rutas de escape y revisando puntos estratégicos.
Incluso, en medio de la confusión, la adolescente alcanzó a comunicarse con su madre para decir que había sido “cogida”, lo que reforzó la creencia de que se trataba de un secuestro real.
El hallazgo inesperado
Horas después, una patrulla encontró a la menor caminando por el sector de la Bahía. Estaba sola, en buen estado de salud y sin signos de violencia. Al ser interrogada, la adolescente confesó que había inventado la historia del rapto.
Según la versión oficial, la joven se ausentó de su hogar por decisión propia tras tener diferencias familiares y nunca estuvo retenida contra su voluntad.
La difusión de la falsa historia
La investigación preliminar señala que personas cercanas a la menor habrían colaborado en la propagación de la versión falsa. A través de grupos de WhatsApp y redes sociales se compartió un video de una camioneta gris, presentado como prueba del secuestro, lo que aumentó la tensión en la ciudad.
Las autoridades revisan si hubo cómplices que ayudaron a sostener la mentira y quiénes fueron los responsables de divulgar material manipulado para reforzar la farsa.
El llamado de las autoridades
El coronel de la Metropolitana subrayó que la adolescente no sufrió maltrato ni abuso, y que fue entregada a su padre, quien viajó desde Barranquilla para hacerse cargo de ella.
Finalmente, la Policía pidió calma a la ciudadanía y exhortó a no difundir información no confirmada. Según recalcaron, este tipo de rumores generan miedo colectivo y afectan la percepción de seguridad en Santa Marta.