Orlando de la Vega había sido capturado en enero del 2024 por exigir dinero a comerciantes en nombre de un grupo criminal. Este martes fue asesinado a tiros dentro de su casa en Santa Marta.
Un nuevo homicidio estremeció al barrio La Paz en Santa Marta la noche del martes. La víctima fue Orlando de la Vega, un joven de almenos de 25 años que, según registros oficiales, tenía antecedentes por extorsión y presuntos vínculos con las Autodefensas Conquistadores de la Sierra.
El crimen ocurrió alrededor de las 9:30 p.m., cuando un hombre armado ingresó a la vivienda de De la Vega y le disparó en repetidas ocasiones. El ataque sucedió frente a varios familiares que no pudieron hacer nada para evitar el asesinato.
La Policía Judicial investiga el hecho como un posible ajuste de cuentas entre bandas dedicadas a actividades extorsivas y narcotráfico en la región. De la Vega había sido capturado en enero de 2024 en el municipio de Ciénaga, cuando, junto a otro individuo, exigía una suma de cinco millones de pesos a un comerciante local.
El joven fue sorprendido en flagrancia durante un operativo del Gaula, que se desplegó luego de que la víctima denunciara las amenazas. Aunque fue detenido, recuperó su libertad poco tiempo después. Desde entonces, vecinos del barrio aseguraban que lo veían envuelto en movimientos sospechosos y acompañado por personas armadas.
Operativo del Gaula-2024
De la Vega, conocido por su alias “El Niñón”, alternaba una vida aparentemente tranquila con actividades delictivas. De día, era visto compartiendo con su familia; de noche, según algunas versiones, continuaba vinculado a cobros ilegales en zonas de Santa Marta y Ciénaga.
El asesinato no solo dejó un vacío en su hogar, sino también una historia repetida. Su madre ya había perdido a otro hijo años atrás en circunstancias similares. La familia, hoy nuevamente de luto, pide justicia y garantías de seguridad en un barrio cada vez más golpeado por la violencia.
Hasta el momento, no hay capturas por este crimen. Las autoridades reforzaron la presencia policial en el sector y anunciaron que seguirán con las indagaciones para dar con los responsables del ataque. Mientras tanto, la comunidad permanece en silencio, entre el miedo y la resignación.